Experiencia de usuario: lenguaje inclusivo de género

¿Cómo usar un lenguaje más inclusivo que no discrimine hacía ningún género?

Cuando se crean las páginas web y se crea su contenido, se intenta utilizar un tipo de vocabulario que haga referencia a todo tipo de personas, sin discriminar por género, sexo, raza, religión…

Es verdad que, en el caso del castellano, es difícil en ciertas situaciones intentar no distinguir entre géneros, así como pasa con otros idiomas como, por ejemplo, el italiano. En cambio, el euskera y el alemán son idiomas más inclusivos.

Así pues, desde Ebolution queremos exponer una serie de estrategias útiles que permiten escribir y hablar de manera inclusiva, y que facilitan la creación de un contenido mucho menos exclusivo.

Estrategias para escribir y hablar de manera más inclusiva

No diferenciar entre “Sra.” y “Srta.”

Esta diferencia se suele utilizar mucho para referirse al estado civil de las mujeres cuando es realmente innecesaria para redactar cualquier tipo de contenido.

Es muy común a la hora de redactar formularios que aún se siga preguntando y diferenciando entre una opción y la otra.

Evitar el masculino genérico

A poder ser, es adecuado no usar solo el masculino genérico para referirnos a un conjunto de personas, sino usar tanto el masculino como el femenino, para dar visibilidad al género femenino y a las mujeres.

Utilizar sustantivos colectivos

Cuando no es necesario mencionar a una ocupación que se refiera directamente a las personas, se puede utilizar el grupo, la institución o la función. Por ejemplo, en vez de “un conjunto de alumnos”, se puede sustituir por “el alumnado”. De este modo, no hacemos uso de ningún género y usamos sustantivos más genéricos.

Utilizar la palabra persona

La palabra persona hace que los textos muestren un aspecto más humano, además de inclusivo. Como hemos mencionado en el punto anterior, el término hace referencia a un colectivo y a un grupo de personas, sin entrar en detalles o especificaciones concretas. 

Uso de pronombres

El uso de pronombres relativos como “quien” o “quienes” o el uso de pronombres indefinidos como “alguien”, “nadie” y “cualquiera” seguidos de un sustantivo común.

Usar el pasivo

Una forma recomendable a la hora de escribir es emplear el “se” de forma pasiva con el fin de no utilizar la primera persona del singular o del plural. Por ejemplo, es preferible decir “se aconseja” a decir “te aconsejamos”.

Cuidar los detalles de los productos

A veces, hay que hacer una balanza entre la personalización y la inclusividad. En caso de que un suscriptor de un boletín se llame “Laura”, es usual poner en la introducción del correo Bienvenido Laura”, haciendo uso del masculino genérico. Por ello, en estos casos es recomendable no usar tanto la personalización si nos puede causar una mala jugada, y utilizar una frase similar a esta “te damos la bienvenida”, donde no hacemos exclusión de ningún colectivo.

Ser coherentes

Cuando se redacta un texto, hay que ser coherente y saber que, si la protagonista de la historia de una campaña de marketing es una mujer, las frases y las palabras deben ir declinadas al femenino.

Por otro lado, también encontramos algunas técnicas o herramientas que se emplean y que no son recomendables desde el punto de vista de la experiencia de usuario.

El uso de símbolos o formas alternativas

El uso de asteriscos, apóstrofes o arrobas al final de una palabra genera problemas en cuanto a la pronunciación de la misma, ya que el castellano no tiene género neutro como si lo tienen otras lenguas. Además, hay personas que tienen más dificultades en cuanto a la lectura, como pueden ser las personas disléxicas o con déficit cognitivos, por lo que ser demasiado inclusivo en este caso puede ser un error, siendo peor el remedio que la enfermedad.

Uso de la barra [/] o los paréntesis [()]

Muchas veces, para intentar incluir a ambos géneros dentro de un mismo texto, se usan ciertas herramientas tipográficas como la barra [/] o el paréntesis [()] para hacer referencia también al género femenino. Esto, desde el punto de vista de la experiencia de usuario, puede sobrecargar el texto y dificultar la lectura.

Para hacer un buen uso y proyectar una buena experiencia inclusiva es importante entender las personas para las que se está redactando y saber cómo hablan de sí mismos y como expresan sus emociones. Es decir, hay que conocer como es el grupo de gente al cual nos dirigimos para intentar escribir acorde a su estilo y su forma de expresarse también.

Además, el uso de un lenguaje inclusivo se está aplicando cada vez más en los chatbots, en los que se intenta conocer al usuario para hablarle en el lenguaje más adecuado.

En Ebolution somos expertos en cuidar la experiencia de usuario. ¡Únete a nosotros! Nuestro equipo de profesionales UX te ayudará a crear o realizar todos los cambios que necesite tu web.